Un país para pocos

Informe elaborado por Tomás Raffo y Claudio Lozano  que  demuestra cómo la política devaluacionista del Gobierno de Macri le permitió a los multimillonarios locales aminorar sensiblemente sus pérdidas en dólares cuando estas se valúan en moneda local. En pesos la reducción patrimonial, a consecuencia de la monumental transferencia que implica la devaluación, sólo asciende al 5,2 %. Pero más importante aún, para juzgar el vínculo con estas fortunas del actual gobierno, es observar la evolución patrimonial tomando la información del año anterior.

Presentamos:

– la evolución patrimonial en dólares y en pesos de las 8 fortunas más importantes.

Demostramos que:

– la política de Macri posibilitó que en simultáneo con el aumento de la pobreza y la indigencia, estos 8 multimillonarios incrementaran su patrimonio en un 51,4% en dólares y en un 253% en pesos.

– el aumento patrimonial que posibilitó la devaluación equivale al valor de las canastas de bienes y servicios necesarias para que 16 millones de personas salgan de la pobreza.

– Considerando el valor de las 50 fortunas estimamos que se resignaron recursos públicos por más de 600 millones de dólares que hubieran permitido sacar de la pobreza a más de 300.000 personas y de la indigencia a casi 800.000.

Concluimos:

– Si se restituyera la alícuota del mencionado Impuesto a los Bienes Personales en 0,75 por ciento, no solo a las 50 fortunas más importa sino a los que detentan un patrimonio superior al millón de dólares, lo recaudado bastaría para terminar con la indigencia y para reducir la pobreza del 34,1 por ciento actual al 19,7. Sin embargo, esta no es la opción del gobierno de Macri.

Para Lozano, “en su edición de Junio del 2019 la Revista Forbes se lamenta por la difícil situación que viven los millonarios argentinos. Estos habrían visto caer su patrimonio en un 18,2%. Dicha publicación muestra el ranking de las 50 familias más ricas de la Argentina evidenciando que, pese a la difícil situación que estarían atravesando, la fortuna total de las mismas ascendería hoy (de mínima) a U$S 57.260 millones. Es decir, un promedio por familia de unos 1.145 millones de dólares. En este material proporcionamos algunos argumentos con el objeto de tranquilizar la preocupación de Forbes. Por un lado demostramos cómo la política devaluacionista del Gobierno de Macri le permitió a los multimillonarios locales aminorar sensiblemente sus pérdidas en dólares cuando estas se valúan en moneda local. En pesos la reducción patrimonial, a consecuencia de la monumental transferencia que implica la devaluación, sólo asciende al 5,2%. Pero más importante aún, para juzgar el vínculo con estas fortunas del actual gobierno, es observar la evolución patrimonial tomando la información del año anterior (2017), que extrañamente la Revista Forbes no presenta. Al considerarlo todo cambia ciertamente de color. Como muestra, presentamos aquí la evolución patrimonial en dólares y en pesos de las 8 fortunas más importantes (que además detentan el 45% del patrimonio total de las 50 familias más ricas) en los años 2017/18 y 2019. En concreto, comparando el 2019 con el 2017, se observa que la política de Macri posibilitó que en simultáneo con el aumento de la pobreza y la indigencia, estos 8 multimillonarios incrementaran su patrimonio en un 51,4% en dólares y en un 253% en pesos. El trabajo demuestra también que el aumento patrimonial que posibilitó la devaluación equivale al valor de las canastas de bienes y servicios necesarias para que 16 millones de personas salgan de la pobreza. Consideramos también la pérdida de recursos públicos que Macri decidió tener al reducir la alícuota del Impuesto a los Bienes Personales. Considerando el valor de las 50 fortunas estimamos que se resignaron recursos públicos por más de 600 millones de dólares que hubieran permitido sacar de la pobreza a más de 300.000 personas y de la indigencia a casi 800.000. Por último, el trabajo vuelve a insistir en el hecho de que si se restituyera la alícuota del mencionado Impuesto a los Bienes Personales en 0,75 %, no solo a las 50 fortunas más importa sino a los que detentan un patrimonio superior al millón de dólares, lo recaudado bastaría para terminar con la indigencia y para reducir la pobreza del 34,1% actual al 19,7. Sin embargo, esta no es la opción del gobierno de Macri. Su política es “menos ricos cada vez más ricos con pobres cada vez más pobres”. Seguramente esta decisión se vincula con el hecho objetivo de que la fortuna número treinta y cinco de las 50 más importantes del país corresponde a la mismísima familia presidencial”.