El material que aquí presentamos elaborado por Ana Rameri y Claudio Lozano, compara el derrumbe social vivido por la sociedad argentina en el año 2018 y medido por la evolución de la pobreza y la indigencia con otros momentos de la historia reciente, al tiempo que presenta la distribución territorial de este deterioro social y las diferencias de género.
Para Lozano, «surge así que el salto vivido en materia de pobreza durante el último año equipara lo ocurrido entre octubre del 2000 y octubre del 2001, es decir en el año previo a la debacle del 2001.
Por otra parte el material muestra que las provincias más pobres se encuentran en el nordeste del país (Corrientes 57,9%; Gran Resistencia 45,7% Gran Paraná). En una situación similar aunque un poco por debajo se ubica el Noroeste del país, 38,4%, con Salta en el 45,3% y Catamarca con el 40,7%. Es importante señalar que el Gran Buenos Aires supera con el 40,9% a Catamarca. Respecto a la Indigencia si bien Corrientes y Chaco encabezan los porcentajes de hambre en nuestro país, Córdoba (9,7%), Gran Bs. As. (9,4%) y Mar del Plata (8,8%) son centros urbanos sumamente poblados y con situaciones por demás preocupantes.
El material también exhibe que la mayor concentración de población pobre se da en la región Pampeana y en el Gran Buenos Aires. Ambos concentran el 75% de los pobres de la Argentina. Por último, en relación a este tema, 19 de los 31 aglomerados medidos por el INDEC exhiben incrementos de la pobreza superiores al promedio. Se destacan el Gran Rosario (119%), Bahía Blanca (108%), Gran Paraná (97,1%) y Tierra del Fuego. Asimismo, es destacable el aumento de la indigencia en la Región Patagónica (168%). Respecto a las diferencias de género el material exhibe la mayor dificultad de las mujeres para salir de la pobreza ya que la diferencia de ingresos entre el hombre y la mujer es mayor en los sectores más pobres».