Presentamos a continuación la segunda entrega del Monitoreo de Coyuntura del IPyPP, elaborado por Claudio Lozano y equipo, que resume la última información disponible sobre los siguientes capítulos: productivo, concentración económica, cuentas fiscales, endeudamiento, sistema monetario y financiero, mercado laboral y configuración social.
En el informe tomamos como punto de partida, para analizar cada uno de los capítulos, un diagnóstico estructural con el objetivo de identificar las principales problemáticas que condicionan a la economía argentina para luego presentar un seguimiento actualizado de los principales indicadores relacionados.
De la información hasta el tercer trimestre del 2021 podemos destacar lo siguiente:
– Si bien la recomposición de la economía continúa luego de la segunda ola del Covid, la recuperación del consumo interno sigue siendo lenta y se verifica un patrón distributivo más regresivo que el existente antes de la pandemia. Tanto los salarios como el empleo, especialmente el empleo privado, no logran recomponerse.
– La reciente aceleración de precios en septiembre renueva la ofensiva de los grupos concentrados por la ampliación de la captura del excedente empresario que creció 1 p.p. del PBI por mes durante los últimos 15 meses. Privilegios que, frente a las muestras de resistencia por congelar los precios de los bienes de la canasta, no parecen querer devolver. Mientras la canasta básica alimentaria aumenta al 54,5% anual, las ganancias operativas de las grandes empresas del rubro se expanden exponencialmente, dando continuidad al aumento del 137% de las ganancias operativas observadas en el 2020.
– No existe ningún Plan Platita. El análisis objetivo de los indicadores fiscales y monetarios dan cuenta de la vigencia de una contracción real de la base monetaria y un escenario de fuerte austeridad fiscal que ubica el déficit fiscal entre 0,3% y 1,3% dependiendo de si se consideran los DEGs del FMI. Tampoco es cierto que falten dólares: tan sólo en los últimos nueve meses la diferencia entre las necesidades y fuentes de divisas es favorable por 7.000 millones de dólares.
– Los últimos anuncios realizados como bonos, créditos baratos, compensaciones parciales y focalizadas no hacen mella en un cuadro social que sostiene uno de los niveles de empobrecimiento más graves de la historia con más del 40% de la población pobre y más del 10% con hambre.